sábado, noviembre 29, 2008

HISTORIA ÍNTIMA DE LOS RUSOS EN CUBA

Historia íntima de los rusos en Cuba

Por Ángel Tomás González
El Mundo, España
28 de noviembre de 2008

"A los rusos, los cubanos de a pie les llamaban 'bolos', y 'heroico pueblo soviético' en discursos y en la propaganda oficial. El origen del término 'bolos' se desconoce, pero su significado se entendía como un desprecio cariñoso por la estampa pueblerina, tosca y cursi de rusos y rusas que llegaron a la isla a partir del año 1962. Y como los rusos de entonces desconocían el uso del desodorante, sus axilas malolientes fueron las que les hicieron impopulares. Moscú, en su papel de metrópoli, invadió la isla con millones de ejemplares de su literatura del 'realismo socialista', en la que personajes acartonados tenían como meta de vida alcanzar proezas laborales o guerreras".

"Las proyecciones de filmes soviéticos, a su vez, adjudicó a los cubanos la rareza de ser el único público de la cultura occidental conocedor de la filmografía rusa marxista-leninista. Los noviazgos fueron los más favorecidos por el cine soviético exhibido durante tres décadas. Las salas cinematográficas nunca se atiborraban de público y como la trama argumental de los filmes se desarrollaba con extrema flema, las parejas podían explorar sus cuerpos con ritmo lento, profundo y sin ahogar suspiros, gracias al estruendo de los tanques de guerra en la pantalla. Pero películas chinas y coreanas norteñas eran lo máximo para los amoríos, la ausencia de espectadores favorecía la desnudez indispensable".

"…Los miles de filmes soviéticos proyectados en la isla durante tres décadas eran asexuales. Nunca se vio un apasionado beso de tornillo y mucho menos un insinuante desnudo femenino. Los personajes acostados en cama eran sólo enfermos de gravedad o heridos de guerra. Ruso, en la isla, se asociaba con guerra, heroicidad, sacrificio, camaradería, disciplina, aburrimiento, pero nunca con erotismo. Hubo trueno de aplausos y silbidos festivos cuando una joven actriz rusa exhibió el pecho desnudo en un filme soviético del año 1983. El efecto de ver senos rusos en la pantalla fue más allá del asombro. Algunos cubanos lo asumieron como el presentimiento de que se estaba gestando una hecatombe política en el país escondido detrás del Telón de Acero".

"Y finalmente ocurrió. El Moscú de la perestorika y el glasnot, en 1991, rompió amarras políticas y económicas con su único aliado en el Caribe y América Latina y en 1995 ordenó la retirada de los últimos 500 soldados de la Brigada de Infantería Motorizada que quedaban en la isla. El contingente militar ruso, después de 33 años sin haber disparado ni un solo tiro contra el enemigo imperialista, regresó a una Rusia capitalista. La Brigada de Infantería Motorizada, con 43 mil soldados, dos batallones de tanques, aviones, helicópteros, submarinos y cohetes nucleares, había desembarcado en Cuba en setiembre de 1962. Un mes después se desató la crisis de los misiles y durante trece días el planeta padeció la pesadilla de extinguirse por explosiones de ojivas nucleares. Cuba ha sido la única isla del mundo que ha llegado a la categoría de potencia militar global durante trece días. La permanencia en tierra cubana, posteriormente, de la reducida Brigada de Infantería Motorizada rusa estaba limitada al efecto espantapájaros. Fidel Castro y su hermano Raúl conocían, desde fines de los años 70, la decisión de Moscú de mantenerse al margen en caso de que EE UU invadiera a Cuba".

"Se calcula en unos 30 mil los asesores civiles rusos que colaboraron con la burocracia cubana en atornillar el modelo del socialismo de Estado. Pero los soviéticos jamás aprendieron a bailar música salsa y tampoco cautivaron a las cubanas. Sólo se conoce el caso un ruso casado con cubana que vive en la isla y baila con la sabrosura de los negros isleños. Las rusas, en cambio, si compartieron lecho matrimonial con cubanos mulatos y negros, principalmente. Sus hijos e hijas, en la calle, son identificados como 'bolos-jabaos' por sus cabellos ensortijados, ojos verdes o azules, piel de tono mestizo y un segundo apellido difícil de pronunciar en castellano".

"…Ahora Rusia, en los últimos tres meses, ha reiniciado un intenso flirteo con Cuba con la intención de restablecerse otra vez en la isla. Ya no son los rusos leninistas de antes, ahora son capitalistas. Por lo que la burocracia isleña, sujetada a la ortodoxia que aprendieron de los soviéticos, mira con reservada desconfianza a estos rusos vestidos con trajes elegantes y olor a perfumes caros. Cuba, oficialmente, sigue celebrando los aniversarios de la extinta revolución de octubre ocurrida en Rusia en 1917".